En diversos libros de Finanzas Personales, por ejemplo en el de El hombre más rico de Babilonia, una de las recomendaciones que más se leen es: guardar para sí mismo no menos del 10 % del ingreso.

Al igual que en ese libro, en artículos de revistas y recomendaciones de la abuela, padres, hermanos, primos o amigos, esto también es conocido.

La gran pregunta es: ¿Ya lo estoy haciendo?

La buena noticia es que si tu respuesta fue no, hoy es un gran día para iniciar.

Pero…¿cómo iniciar? Si tenemos un ingreso por sueldos y salarios, sería correcto separar el 10% del ingreso neto quincenal. Si nos acomoda más hacerlo en forma mensual, adelante, la situación aquí es hacerlo. Si ya lo estamos haciendo, ¡excelente!

Ya mi colega Edgar Arena nos dio unos tips de Planeación Estratégica de Inversión que pueden leer aquí.

Una vez que tengamos identificada la cantidad mínima que vamos a Ahorrar –Invertir, así como el monto de dinero que vamos a tener en cada clase de activo (corto, mediano y largo plazo) hay que convertir en inversión dicho ahorro mensual.

¡Los grandes capitales se forjan a lo largo de una vida!

Al igual que todo lo que lleva una evolución, un capital inicial personal, difícilmente empezará en un millón de pesos (con contadas excepciones). Para todos los demás que tenemos ingresos por sueldos, honorarios profesionales, etc., si no ahorramos mes a mes, difícilmente tendremos una base creciente de dinero. Y ese es el nombre del juego: ¡Crecer y hacer crecer mi patrimonio! Pero recuerda: cada uno es responsable de hacerlo.

Hagamos números

Si hoy logras identificar que el 10% de tu ingreso mensual son $10,000 pesos, alégrate de que la piedra angular de esta inversión sea esa cantidad.

Esa cantidad es la que deberá evolucionar y convertirse en inversión.

Las 3 reglas del juego para ¡Crecer y hacer crecer mi patrimonio! son:

1.- Separa: ahorra, mínimo, el 10 % de tu ingreso neto mensual.

2.- Invierte (evoluciona) tu ahorro mensual en activos que con el tiempo incrementen su valor.

3.- Ten presente que el dinero que es para tu futuro (por ejemplo el retiro) no lo debes tocar ahora (en tu vida laboral productiva).

Mes a mes, o en forma trimestral, revisa en qué estás invirtiendo, qué rendimiento te dio o te ha dado cada activo y en qué activo invertirás el próximo 10 % de tu ingreso.

Si logras crear este ahorro mensual y convertirlo en Inversión mensual, habrás creado uno de los mejores hábitos económicos financieros para tener finanzas sanas a lo largo de tu vida.

Por Jesús Moisés García