Es muy común que en el alba de un año comencemos a lanzar al aire nuestros planes. Sin duda, el más recurrente: perder esos kilos que nos dejaron las fiestas navideñas. Otros más, se proponen dejar el cigarro o leer más. Algunos, los menos, se proponen metas con objetivos medibles.
Cada cierre de año viene acompañado con un maratón de festividades y por supuesto de la llegada del anhelado aguinaldo. Además, de este ingreso y el salario, algunas empresas otorgan bonos adicionales en esta temporada decembrina, y con su llegada, inevitablemente, comenzamos a hacer planes sobre… ¡cómo gastarlo!
Las grandes firmas de inversión que consolidan los activos de algunas de las compañías que cotizan en Bolsa, han puesto de moda acrónimos para agrupar a empresas que tienen un desempeño bursátil excepcional.
Juventud divino tesoro, sin duda alguna, es un dicho que tiene toda la razón.
Muchas veces hemos escuchado que “el tiempo se va volando”, frase que toma más sentido cuando ya se tiene más de 50 años.
Si ya rebasaste la década de los 30 y te has dado cuenta de la importancia de invertir y planear tu futuro financiero, es importante que conozcas los conceptos que maneja el mercado para entender las reglas del juego.
Hoy en día, para bien de todos los inversionistas mexicanos, existen muchos y diversos productos e instrumentos de ahorro, protección e inversión que forman parte del Sistema Financiero mexicano y están regulados y protegidos por sus leyes y reglamentos.
Se acabaron las fiestas decembrinas y comienzan los propósitos y proyectos.
Robert Mondavi es el nombre del visionario que hace 50 años dio vida al Valle de Napa, en California.
Después de las celebraciones y la diversión, llegan a su fin las fiestas decembrinas. Así, se normalizan las actividades de un año nuevo.
Llegó enero, mes en el que regresamos a la vida cotidiana, al día a día, al estrés, al caos de la ciudad.
Estamos comenzando un nuevo año, un ciclo de retos que deberán enfrentarse con las mejores armas, y claro está, con buenos deseos.