El imperio Bailleres

Alberto Bailleres González nació en la Ciudad de México en 1931, según la revista Forbes, actualmente es el tercer hombre más rico del país, solo por detrás de Carlos Slim Helú y Germán Larrea Mota.

Es dueño de Grupo Bal que conglomera a las empresas: Industrias Peñoles, Palacio de Hierro, la compañía de seguros Grupo Nacional Provincial (GNP), fondos de pensiones Grupo Profuturo, Crédito Afianzador, Sofom Valmex, Médica Móvil y el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), entre otras. Además, recientemente invirtió en la compañía mexicana Petrobal.

Pero quien potencializó la riqueza del empresario, que actualmente se estima en 8.5 mil millones de dólares, fue Industrias Peñoles, la segunda mayor empresa minera de México y la principal productora de plata en el mundo. Peñoles cuenta con las minas Fresnillo (plata), La Herradura (oro), La Ciénega (oro) y Met-Mex.

Bailleres González también es dueño de una participación en FEMSA y es el Presidente del consejo de administración del ITAM.

La carrera de este magnate mexicano ha estado plagada de éxitos, sus inversiones en diversos negocios le permitieron engrosar casi 10 veces más la fortuna que heredó de su padre Raúl Bailleres.

Y aunque actualmente Peñoles significa su mayor entrada, la industria minera a lo largo de la historia tiene sus vaivenes, por décadas pueden tener buenos dividendos, pero algunos años, la variación en el mercado, puede mermar la capacidad de las mismas, es aquí donde la diversificación en las inversiones es esencial.

Dentro del Grupo Bal, existen empresas cuyos rubros y operatividad distan una de otra. Palacio de Hierro, tienda departamental que su padre Raúl Baillares compró a unos inmigrantes franceses en 1948, hoy es un referente de prestigio en el país.

Su crecimiento de una tienda que está aún en el Centro Histórico, se ha expandido a siete en la Ciudad de México, más las tiendas que hay en las urbes: Monterrey, Puebla, Guadalajara, Acapulco y Villahermosa.

Recientemente realizó una inversión de 300 millones de dólares para remodelar su tienda en Polanco, esto con la intención de entablar una competencia directa con Liverpool y Saks Fifth Avenue.

Otra empresa que ha crecido es Médica Móvil, la cual nació en 1982, y se ha convertido en la principal en el ámbito de la medicina prehospitalaria móvil.

Actualmente a sus 85 años de edad, Bailleres González, sigue pensando en las inversiones y a comienzos de año incursionó en un nuevo negocio, el petróleo con PetroBal, que es una nueva empresa enfocada en la exploración y producción de hidrocarburos (petróleo y gas), que se vio beneficiada por la reforma energética.

Su incursión en el mundo de los negocios del petróleo comenzó con el pie derecho, incluso ya ganó un contrato en la segunda etapa de la Ronda Uno, la cual comprende los campos Ichalki y Pokoch.

PetroBal formó alianza con la estadounidense Fieldwood Energy, y ambas invertirán alrededor de mil millones de dólares para la explotación de los dos pozos.

La apuesta por el negocio petrolero, no sólo se limita a los pozos mencionados, la idea de la empresa de Bailleres González, es adentrarse a la exploración en aguas profundas, donde las ganancias podrían llegar a ser de miles de millones de dólares.

Alberto Bailleres González ha logrado incrementar la fortuna que heredó de su padre, con inversiones en diversos sectores, es decir, diversificando. Esta es la clave del éxito en las inversiones.

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