En 2002 nacía la moneda comunitaria, el euro, que iba a unir a la Europa de posguerras y a convertirla en el mayor bloque económico del orbe.
En 2012, cuando el euro cumplía 10 años, muchos avizoraban incluso el fin de la moneda en el corto plazo. Hoy, a 15 años de su nacimiento, la divisa, segunda más importante del mundo, sigue en pie, pero no se pinta la cara ni irá al baile.
La primera mitad de su corta vida el euro puede presumir de haber cambiado los destinos del viejo continente. La segunda mitad deja mucho que desear. A tal punto que Otmar Issing, economista alemán, uno de los arquitectos del euro, ve el futuro de Europa con mirada triste.
En este sentido, ha dicho a la prensa internacional que, aunque el euro es la segunda moneda más importante, y su desempeño ha sido mejor de lo esperado, la zona euro como un todo no es presumible.
Para el fundador de la unión monetaria, uno de los talones de Aquiles del bloque ha sido la falta de una estrategia diseñada para la salida de alguno de sus miembros.
En el reportaje que Casa de Bolsa Finamex preparó para ti, conoce qué le espera al euro tras cumplir sus 15 primaveras.
Por Gabriela Guerra
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