“Y vivieron felices para siempre” ¿Te acuerdas de esa frase que culminaba casi todos los libros de cuentos y querías que algún día se escribiera sobre ti?
Lo que nunca comprendimos de esa frase, es que, vivir felices para siempre, implica: amor, respeto, paciencia, pagar deudas conjuntas y analizar en qué se va a gastar e invertir.
Algo que debes recordar es aquel dicho que dice: “Cuando el hambre entra por la puerta, el amor sale por la ventana”, así que si amas a tu pareja es momento de poner a trabajar el dinero, es decir, es hora de invertir.
Sin duda alguna, cuando estamos enamorados todo parece miel sobre hojuelas, pero es necesario compartir detalles que hasta ese momento sólo nosotros conocíamos. Por ejemplo: cuánto ganamos, en qué gastamos y si tenemos ahorros.
Aunque febrero, es un mes ideal para hacer planes con esa persona especial, derrochar amor y decirle lo mucho que la amas, es importante hablar de dinero (aunque no suene nada romántico). Es una de las conversaciones más importantes que debes tener con tu pareja.
No sólo se trata de hablar de finanzas con tu pareja, sino de crear un presupuesto que tenga como finalidad optimizar la manera de cómo utilizan sus ingresos. También les ayudará a evitar gastos superfluos, definir una cantidad para el ahorro y la inversión. Así podrán lograr metas específicas y permitirán que su relación avance, se haga sólida y, sobre todo, consigan estabilidad financiera.
Se dice que el matrimonio o cualquier relación donde una pareja comparte un hogar es similar a una empresa. Esto se debe a que cualquier compañía tiene accionistas que aportan y se benefician de las utilidades, sin embargo, también hacen gastos e inversiones. Por lo tanto, es necesario que tanto tú como tu pareja sean inversionistas de esa empresa que es su hogar, hagan gastos necesarios y eviten los innecesarios. Además, deben hacer un uso sensato de los créditos y cuidar los gastos hormiga.
Es decir, es momento de que ambos tomen el control de sus finanzas y opten por tener un buen uso de su patrimonio, que ahora, es de los dos.
Ahora que juntos establecieron un plan de ahorro es momento de comenzar a invertir, esto significa poner a trabajar su dinero.
Antes de invertir, tanto tú como tu pareja deben saber para qué van a hacerlo, tal vez comprar la casa de sus sueños, emprender un negocio, tener un patrimonio para cuando la familia crezca o contar con el suficiente capital para el retiro.
Luego de tener un objetivo claro, es de suma importancia acercarse a una institución financiera regulada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), y una Casa de Bolsa es un Aliado con Valor que podría ayudarles.
Las Casas de Bolsa son instituciones especializadas en el manejo de inversiones y ponen a su disposición a sus asesores expertos que les ayudarán a diseñar una Estrategia de Inversión diversificada, la cual se basará en sus objetivos, situación patrimonial, intereses y su perfil de inversionistas, es decir, su aversión al riego.
Invertir es como tener un matrimonio, se establecen cláusulas y se define un tiempo. En el caso de la pareja es hasta que la muerte los separe, mientras que la inversión tendrá un plazo y se debe respetar.
Debes tener presente que, así como tu relación de pareja tiene altibajos, también lo tendrá tu inversión. El amor vencerá los problemas mientras que en las inversiones una buena diversificación y la estrategia adecuada darán como recompensa rendimientos con los que podrán concretar sus sueños.
Es momento que tú y tu pareja definan qué harán con sus finanzas y hacia a dónde quieren llevar sus vidas. Contacta a un asesor financiero, él será su guía para conseguir una vida próspera.
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