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¿Cómo está parado México frente al mercado global en la actualidad?

Tiempos de cambio, tiempos de adaptación

Luego de unas elecciones históricas celebradas el 1 de julio de 2018, en las que los mexicanos decidieron la alternancia en el poder, en México existe un optimismo mesurado sobre la manera en que se toman decisiones que impactan en prácticamente todos los campos. La incertidumbre se puede percibir tanto en los ámbitos locales como en los internacionales.

Primera llamada de atención

La cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) tuvo un efecto negativo en la economía del país. El Banco de México advirtió que, debido a la incertidumbre que causó dicha decisión, los inversionistas extranjeros podrían reducir sus flujos de capital.

Los trabajos de edificación ya habían comenzado, había mucho dinero invertido, se habrían colocado miles de millones de pesos en bonos para financiarlo, de los cuales 13 mil 500 fueron adquiridos por las Afore. Cerca de 45 mil personas ya trabajaban en la construcción del aeropuerto y se esperaba que para finales del año pasado se incrementara hasta 70 mil.

El dinero era privado, por lo que en principio los recursos del gobierno no se encontraban en riesgo, sin embargo, el presidente anunció que se garantizaría el pago de los bonos emitidos y que protegerá las inversiones de las Afore.

Además de las pérdidas que sufrió el erario federal, los inversionistas extranjeros y las calificadoras vieron esta decisión como autoritaria y una pérdida de oportunidad para que nuestro país siguiera consolidando su vocación turística.

Un pequeño dato

En los primeros tres meses de 2019, el consumo privado aumentó 0.2% respecto al primer trimestre de 2018. Esta tasa de crecimiento es la más baja observada desde el cuarto trimestre de 2009. Este dato ha nublado las perspectivas de crecimiento de la economía mexicana.

 

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Calificadoras reprueban a México

Desde hace un par de semanas, distintas calificadoras han dejado las cosas claras en dos temas trascendentales de la estabilidad macroeconómica del país: la penosa situación financiera de Pemex y la preocupación sobre la incertidumbre que ha generado la política interna a los inversionistas.

Aunque el Gobierno Federal ha criticado y desaprobado las decisiones de las calificadoras que han disminuido sus previsiones de crecimiento sobre la economía mexicana, la realidad es que ellas pueden ser el mejor termómetro para el inversionista. Pero ¿qué han dicho?

Fitch Ratings (Estados Unidos)

 

Esta calificadora ha disminuido de 2.1 a 1.6% el pronóstico de crecimiento de México. Una de las razones de esta bajada es que ven una desaceleración drástica en el 4T de 2018. Además, han señalado que la confianza empresarial se ve impactada por la incertidumbre política generada por la nueva administración.

 

Barclays (Reino Unido)

 

Este banco inglés bajó a 0.5% el pronóstico de crecimiento de México, desde una previsión inicial del 1.2%. Uno de los aspectos negativos que ven sobre la economía nacional es la incertidumbre que hay en el área de regulación pública y políticas económicas, y han dejado en claro que la inversión ha mostrado signos de debilidad, lo que ocasiona una desaceleración en la creación de empleo.

 

Moody’s (Estados Unidos)

 

Al igual que Fitch, Moody’s ve una de las principales trabas para que México crezca la desaceleración que hay en la inversión privada, alimentada por el escepticismo de las decisiones que tome el Gobierno Federal en esta materia. La calificadora estadounidense ha bajado las perspectivas de 2.2 a 1.7%.

 

 

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No hay receta, pero sí acciones concretas para revertir este panorama

Uno de los salvavidas que ha logrado lanzar muy bien el Gobierno Federal es bajar la tensión con Estados Unidos, el principal socio comercial de México y lograr la imposición de aranceles del 5% a todos los productos mexicanos, una amenaza lanzada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a inicios de junio de este año.

Sin embargo, todas las calificadoras han coincido en que México debe trabajar en varios temas que ayuden a recuperar la confianza en los inversionistas:

  • Fortalecimiento de Petróleos Mexicanos.
  • Respeto al Estado de Derecho.
  • Abatir la corrupción.

Encontrando la oportunidad

A pesar de que estos podrían ser suficientes motivos para guardar nuestro dinero debajo del colchón -o al menos considerarlo- la realidad es que los mercados financieros han mostrado estabilidad. En el contexto actual del país es posible recibir un rendimiento muy superior a la inflación al estar en el mercado de renta fija, debido al alto nivel en la tasa de referencia del Banco de México.

Es importante tomar en cuenta que a través del Sistema Internacional de Cotizaciones (SIC) podemos llevar nuestras inversiones más allá y entrar a mercados internacionales, es decir, diversificar nuestro portafolio, que, si aún no lo has hecho, ésta puede ser la mejor ocasión para llevar a cabo esta práctica que favorece a una estrategia de inversiones sana.

Recuerda que la volatilidad no tiene por qué ser sinónimo de pánico. De hecho, analistas han visto que movimientos bruscos en los precios pueden ser buenos aliados, ya que las recientes caídas han dejado oportunidades en mercados que podrían encarecerse.

 

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