Hilde Cravioto tiene 59 años. Es viuda y tiene tres hijos.
Su vida en el mundo financiero ha transcurrido entre bancos y Casas de Bolsa, lo que le ha permitido acumular la experiencia necesaria para ser una gran asesora en inversiones.
Para esta ejecutiva, que desde hace un par de años trabaja en Finamex ayudando a que los potenciales inversionistas entiendan el complejo mundo en el que ella se desenvuelve, detrás de cada inversión hay una historia que se compone de sueños y esfuerzo.
Hilde juega un papel fundamental en la vida de los futuros inversionistas: guiarlos de la mejor manera para que encuentren el plan de inversión que se adapte a sus necesidades. “Yo ayudo a que la gente ahorre, invierta y cumpla sus objetivos de vida”, cuenta.
Asesor personalizado
Cuando buscamos comprar algún producto, o contratar algún servicio, lo primero que muchos de nosotros hacemos es acercarnos con un especialista. Desde la perspectiva de Hilde, la piedra angular para cuando uno piensa comenzar a invertir es ir con un experto. O con un asesor, como ella.
Su tarea, explica, consiste en escuchar a profundidad la historia que comenzará a escribirse sobre la persona que busca empezar a invertir. Para hacerla de la mejor manera, según dicta la experiencia de Hilde, debe basarse en tres preguntas que el asesor deberá hacerle al inversionista en potencia:
- ¿Sabes para qué quieres invertir?
- ¿Estás dispuesto a ser disciplinado en las aportaciones que harás a tu inversión?
- ¿Qué tiempo estás dispuesto a dejar tu inversión?
Aunque estas interrogantes podrían parecer básicas, resultan ser los principales motores de cualquier inversión.
Toma la decisión
Hilde habla del mundo de las inversiones como uno donde las oportunidades ocurren todos los días y a toda hora. También es un lugar donde la gente puede hacer crecer su patrimonio y materializar grandes anhelos.
En sus casi 30 años de experiencia ha acuñado una serie de consejos que día a día comparte con futuros inversionistas. El más importante y el que siempre recuerda es: nunca dejes de invertir, ya que siempre habrá oportunidad en los mercados financieros.
Por Jesús Franco
