El día de ayer, el “breakeven” de inflación para los bonos del Tesoro de Estados Unidos, o el diferencial entre el rendimiento del bono de tasa fija y el indizado a la inflación para el plazo de 5 años.
Llegó a menos de 1%. Este nivel tan bajo no se había registrado desde 2009.
Lo que sorprende es que a partir de la última reunión de política monetaria de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed), dicho indicador cayó desde un 1.23%. Desde nuestra perspectiva, la única justificación para el comportamiento reciente de los “breakeven” de inflación es una pérdida adicional de credibilidad en la Fed por parte del mercado. El riesgo es que alguien tendrá que ceder.
En este mes se dio a conocer que la inflación anual al consumidor de agosto resultó, tanto en línea con lo esperado por el mercado, como igual a la lectura del mes previo, de 0.2%. La misma historia se dio ayer con el deflactor PCE, en 0.3%. Por su parte, el precio del petróleo WTI se ha recuperado de su nivel más bajo en el año, de 38.93 dólares por barril, alcanzado el pasado 24 de agosto los 45 dólares.
Finalmente, las proyecciones de los miembros de la Fed respecto a la inflación medida por el deflactor PCE tan sólo se modificaron a la baja en una décima para 2016 y 2017, quedando en 1.7% y 1.9% respectivamente, anticipando llegar a 2% en 2018, nivel que corresponde con la proyección de largo plazo.
Por Guillermo J. Aboumrad, Director de Estrategias de Mercado de Finamex
Para leer el reporte completo da clic aquí.
Comparte: