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Planear antes de invertir: el binomio perfecto

Dicen que la planeación es el origen de los grandes éxitos. Muchas personas que han alcanzado grandes metas tienen un secreto común: la planeación. Pero…¿cómo funciona en nuestras inversiones?

Definición que multiplica

Aunque hay una infinidad de factores que nos pueden ayudar a tener una inversión exitosa (o desastrosa), hay un inicio que nadie debe pasar por alto: tener Plan de Inversión.

Para trazar uno en el mundo de las inversiones, es necesario tomar en cuenta dos factores esenciales: identificar los recursos con los que contamos y definir en qué queremos convertirlos. Es decir, pensar en el presente y en el futuro.

Partiendo de lo anterior, el primer paso para diseñar un Plan de Inversión que nos ayude a multiplicar nuestro dinero es revisar cuál es nuestra situación financiera actual. ¿Cómo? Muy sencillo: basta con preguntarnos ¿con cuánto puedo empezar y cuánto puedo ahorrar?

También, nos ayudará mucho identificar nuestras prioridades. Es decir, si actualmente estamos pagando una hipoteca, entonces será difícil que destinemos una cantidad importante de nuestro ingreso al ahorro, pero eso no significa que no debamos ahorrar para después invertir.

 Metamorfosis: del ahorro a la inversión

Una vez que hemos definido nuestra situación financiera actual, es esencial que sepamos en qué queremos convertir nuestro ahorro. Es en ese momento cuando nuestro ahorro se convierte en una inversión.

Cuando definimos en qué utilizaremos el dinero que estamos invirtiendo, mágicamente el plan cobra vida y aparecen ante nuestros ojos los planos de una casa, una jubilación con una vejez tranquila o la educación de nuestros hijos en una universidad extranjera. Sea por necesidad o porque buscamos resolver preocupaciones financieros, una inversión puede darnos grandes satisfacciones.

¿Y después de tener una meta qué sigue?

Tener una meta es una parte de nuestro plan, pero establecer en cuánto tiempo la alcanzaremos es fundamental para que éste funcione.

Para lograrlo, debemos ser realistas y delimitar cuáles son los tiempos en los que queremos ver materializado nuestro proyecto.

“Cuando el futuro nos alcance” va más allá del título de una película setentera de ciencia ficción. Más bien es una frase sobre la que debemos hacer conciencia para evitar que nuestros planes no lleguen a buen fin por una falta de planificación adecuada. No olvidemos que Roma no se construyó en un día.

Si eres un potencial inversionista, es recomendable tomar en cuenta tres puntos básicos para iniciar a materializar tus sueños:

  • Revisa tu situación financiera actual y comienza a ahorrar
  • Transforma tu ahorro en inversión y plantéate una meta
  • Define el tiempo en el que buscas alcanzar tu meta

Ya que hemos definido nuestro Plan de Inversión, el siguiente paso es preguntarnos quién será el compañero que jugará el papel de arquitecto financiero. Recuerden: asesorarnos en una institución con experiencia sólida será la mejor garantía para que nuestro proyecto pase de ser una fantasía a convertirse una realidad tangible.

¿Qué necesito para diseñar mi Plan de Inversión?

  • Revisa tus finanzas
  • Comienza a ahorrar
  • Convierte tu ahorro en inversión
  • Fija una meta
  • Determina el tiempo para alcanzar tu meta

¿Te gustaría diseñar tu propio plan de inversión? 

 

Por Casa de Bolsa Finamex

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