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Es tiempo de vestirse de fiesta

Llega la Navidad, o mejor dicho diciembre, y los compromisos sociales se incrementan y también la elección de los looks para ellos.

Muchos son formales, otros menos. Eso sí, todos tienen un toque festivo por lo que encontrar el outfit perfecto para cada ocasión, no siempre resulta tan fácil.

Puede que tengas que ir con tus clientes a numerosos encuentros, o quizá asistir (sí o sí) a la comida o cena de fin de año de tu empresa. En fiestas todo se vale, por ello es el mejor momento para innovar y lucir aquellas prendas que no siempre te atreves a vestir. O bien, salir de compras y adquirir ese vestido que siempre quisiste pero no sabías cuándo sería el mejor día para lucirlo.

Una pequeña solución

Para que elegir tu outfit para esta época no sea una odisea, te compartimos algunas ideas de prendas que te aliviarán el momento terrible de gritar frente al armario: ¡¿Y ahora qué me pongo?!

Súper formal

Aunque te parezca lo más complicado, al contrario, es la opción más fácil y con la que no te vas a equivocar. Si entre tus invitaciones navideñas, el dress code incluye la palabra “formal”, piensa que es momento de vestir de gala.

*Para ellos: el esmoquin es la mejor opción, además de la más elegante. Puede que sientas que estás demasiado vestido con él, así que puedes optar por eliminar el fajín y solo mantener el moñito. Recuerda que la combinación negro/blanco es la ideal.

*Para ellas: es hora de elegir un vestido largo. Además, aquí no hay que pensar que menos es más, al contrario, es hora del más, de la pedrería, el glitter, los brillos, las lentejuelas y, si refresca, las pieles. Hazte con una capa tipo bolero de pelo y olvídate del vestido de manga larga.

Look chic

Odias las etiquetas y lo que te gusta es, no llamar tanto la atención, pero sí destacar pues no te gusta ser igual. Lo chic es para los arriesgados, para los que no importa si se sienten observados, para los que son capaces de practicar con cualquier mezcla y que les quede bien.

*Para ellos: combina tu camisa y corbata estrecha con un pantalón pitillo y un saco de terciopelo. Si éste te parece excesivo, opta por contemplar un look más discreto con complementos que no lo son; por ejemplo corbatas más rockeras, zapatos bicolores o unos tirantes que te conviertirán en un gentleman moderno.

*Para ellas: si te gustan los esmoquin masculinos, es el momento ideal para sumar uno  tu armario. Un dos piezas de satén, con pantalón entallado y stilettos de altísimo tacón, es una excelente opción. Si no quieres moño, cámbialo por un collar de pedrería.

El lado casual

Hay eventos que no necesitan etiqueta, pero tampoco debes optar por un look como si estuvieras con tu grupo de amigos. Recuerda que aunque sea un evento relajado de trabajo, la imagen siempre cuenta. No hace falta que cambies tu manera de vestir, pero sí puedes darle tu toque festivo con ligeros complementos.

*Para ellos: si no quieres llevar traje ese día, pues la tarde se puede alargar hasta la noche, y quieres disfrutar de ella sintiéndote cómodo, abandona la corbata, completa tus pantalones de vestir con un saco más sport y unos zapatos, por ejemplo de cordones, que sin ser unos Oxford, te hagan sentirte vestido.

*Para ellas: un Little black dress (LBD) nunca debe faltar en tu armario, pues te sacará de múltiples apuros. Ya sea para un encuentro informal, un coctel o simplemente una comida, combínalo con diferentes zapatos de tacón y abrigos o chamarras. Así, tendrás el look perfecto.

 

Por Ruth Martín

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